¿Libros o hamburguesas?

La industria editorial se parece cada vez más a Burger King. Imagen: Unsplash.

El éxito de la comida rápida es la cadena de montaje estandarizada que permite su elaboración. Pan, mayonesa, pepinillos, carne o pollo, tomate y unas patatas fritas para acompañar. En unos pocos minutos tenemos la hamburguesa en nuestra bandeja.

La industria del libro ya se está convirtiendo en Burger King o McDonald`s. Porque vive de los llamados libros basura, un eufemismo que remite a la comida chatarra. Las editoriales tradicionales publican infinidad de títulos, muchos de ellos "basura". Oihan Iturbide, ex editor de Next Door Publishers, asegura que la industria editorial se parece cada vez más a una cadena de comida rápida que a un restaurante de buen menú casero; volumen, no calidad.

Los números avalan lo dicho. Según la agencia de ISBN española, en 2024, se registraron 89.347 títulos, el 67,1% en papel. Eso es una media que roza los 250 libros al día. Por otra parte, el estudio Mercado del Libro en España 2024, para la Fundación Germán Sánchez Ruipérez, añade que el sector editorial vendió el año pasado 77.000.000 de ejemplares, con una facturación que supera los 1.200 millones de euros.

Iturbide agrega: "La industria se sostiene gracias a los libros basura. Los odiamos y los necesitamos. Si no fuera por ellos, no podríamos sacar adelante proyectos más arriesgados. Y, si no, piensa en toda la poesía o filosofía que se publica y después mira a tu alrededor: ¿cuánta gente las lee?”.

Los libros basura se hacen como si se fabricaran hamburguesas porque rápidos y baratos, fáciles de leer y de olvidar. Entran en la lógica de la novedad perpetua, de la ansiedad generalizada. Para colmo, allí están los bookstagrammers y demás influyentes que afirman leer 80 libros por mes, como si atragantarse de libros o hamburguesas fuese una buena idea. Iturbide afirma: “Si no hay presentación, podcast, entrevista o bookfluencer hablando de ello y una buena polémica en redes, el libro no existe”.

Pero no solo hay demasiados autores y demasiados títulos. También hay demasiadas editoriales: 3.160, de las cuales 2.000 publican más de 10 títulos al año y solo 13, 700 o más. Claro, el negocio está concentrado solo en dos grupos editoriales: Planeta y Penguin Random House, que, con sus innumerables sellos, publican tres de cuatro títulos.

Tampoco allí está la solución, porque estas grandes editoriales están saturadas de originales. La solución parece ser la autopublicación. Esto sin tener en cuenta que en esa plataforma, han tenido que poner un límite de publicación (tres libros al día por autor) debido a la avalancha de títulos elaborados por IA. La limitación también da una idea de lo saturada que también está Amazon Kindle Direct Publishing.

Así las cosas, quizá lo mejor sería abandonar el mundo editorial y dedicarse a armar hamburguesas. Eso sí, en Five Guys, donde son más ricas que en Burger o Mac.